Se agudiza la represión contra lucha social: clamor en Atoyac

Miles marcharon en Atoyac para recordar los 34 años del asesinato de Cabañas

Se agudiza la represión contra lucha social: clamor en Atoyac
Ahora ya no sólo es el gobierno, sino la delincuencia organizada, asegura Mesino

ROBERTO RAMIREZ BRAVO (enviado
)

Atoyac, 2 de diciembre. En la tierra de Lucio Cabañas, a 34 años de la muerte del guerrillero, la situación política se ha agudizado: militares, paramilitares, y agentes policiacos operan en las comunidades de la sierra, mientras los luchadores sociales siguen siendo perseguidos con la particularidad de que la represión se justifica acusándolos de delitos del orden común, alertaron dirigentes de organizaciones sociales.

Frente a la escuela Modesto Alarcón, donde impartió clases, se han colocado numerosos puestos de venta por las festividades navideñas que parecen desvincularla con la historia que ahí se gestó. La visión, sin embargo, es engañosa.

Norma Mesino Mesino, de la Organización Campesina de la Sierra del Sur, lamenta la situación de luchadores sociales “porque ya no sólo es el gobierno sino la delincuencia organizada y eso es más difícil, porque los criminales no ven las repercusiones políticas que, en todo caso, el gobierno sí podría prever”.

En las comunidades rurales, dijo Mesino, los grupos paramilitares operan “con caretas de guerrilleros” aterrorizando a la gente de base, mientras en el área urbana se incrementa la militarización, con el agravante de que “te encuentras a un hombre armado con AK-47 y en la esquina a un soldado y no pasa nada; cualquiera puede tirar balazos y la policía puede estar cerca y no pasa nada”.

Salomón Moyao Martínez, integrante de la CETEG, llegó a vivir a Atoyac hace 34 años, precisamente el año en que mataron a Lucio Cabañas. De entonces a la fecha, asegura, la represión “está igual que en esa época, nada más que ahora los maquillan porque a los asesinados, a los detenidos, les van creando delitos para acusarlos de delincuentes”.

En este municipio ha cobrado fuerza recientemente los secuestros, tanto de ganaderos como de profesionistas en general. Los más recientes son los del comerciante Luis Fierro el año pasado, y de la profesora Adriana de Jesús Zárate en este año, por los cuales se ha desatado una persecución orientada hacia militantes de la Organización Campesina de la Sierra del Sur, en particular en la comunidad de Mexcaltepec, en la sierra. En tanto, la Asociación de Familiares de Detenidos, Desaparecidos y Víctimas de la Violación a Derechos Humanos (Afadem), ha sido objeto de hostigamiento militar. En mayo pasado, durante la conmemoración del Día Internacional del Detenido Desaparecido, el local de esta organización fue rodeado por militares, quienes cortaron cartucho al ver a sus integrantes acercarse al mismo.

Un veterano periodista –cuyo nombre se reserva– relató que en esta zona la presencia militar sigue siendo fuerte, y muchos de los familiares de quienes participaron en la guerrilla todavía temen dar sus testimonios por temor. Un simple recorrido por cualquier parte de la ciudad permite ver camiones militares repletos de soldados.

“La desaparición forzada –explicó Julio Mata Montiel, de la Afadem–, como no hay enjuiciados, se sigue cometiendo, la criminalización de los movimientos sociales es más grande. Antes luchábamos por espacios políticos, ahora es por los derechos humanos elementales”.

La represión ahora, dijo, es “más sofisticada, pues ahora no es el ejército el que actúa directamente –como en los tiempos de Lucio Cabañas– sino que entrena a grupos paramilitares y los manda al campo y luego dicen que son conflictos entre comunidades, y se enfrentan a organizaciones contra organizaciones para aparentar que son ellos los que se dan unos a otros”.

Acusa a policías

La regidora perredista Rocío Mesino Mesino acusó a comandante regional de la Policía Investigadora Ministerial (PIM), Leonardo Evangelista Moreno; al jefe de grupo, Antonio Ochoa Montañón y al fiscal en esta zona, Pedro Loyo Malabar, de ser quienes encabezan los grupos de secuestradores que operan en la región, y afirmó que entre ellos han montado una estrategia para detenerla en cuanto deje la regiduría, acusándola de los plagios.

Entrevistada en esta ciudad, la también dirigente de la Organización Campesina de la Sierra del Sur señaló que los tres personajes han hecho detenciones en relación primero del secuestro del empresario Luis Fierro, el año pasado, y recientemente, de la profesora Adriana de Jesús Zárate, y los están obligando a declarar que Mesino es la autora intelectual. Dijo que se enteró que un arraigado por este delito, Efigenio Gervasio Bello, le dijeron: “si te quieres salvar, culpa a Mesino”.

http://www.lajornadaguerrero.com.mx/2008/12/03/index.php?section=sociedad&article=005n1soc