miércoles, 3 de abril de 2024

Reunión de amigos

01/04/2024

UNA REUNION DE AMIGOS

JOSUE SAUCEDO VILLLEGAS




 No soy fanático de las fechas, pero algo es cierto:  Esto sucedió

un fin de semana cualquiera,

acordamos reunirnos después del trabajo un domingo por la tarde mi amigo Erasmo y yo

para visitar a otro compañero de preparatoria, Roberto

Mi amigo Erasmo trabajaba en ese momento en una empresa aduanal y conducía una motocicleta.

llegada la hora de salida espere un poco a mi amigo, llego y nos fuimos camino a a casa de Roberto,

en el camino acordamos le entregaríamos el casco que días atrás le habíamos escondido,

una vez llegamos al lugar nos saludamos, bromeamos un rato, bebimos y fumamos un poco,

y momentos antes de retirarnos Roberto nos cuestionó:

si ya habíamos contestado una encuesta que apareció en la red la cual trataba de juntar a dos perfectos desconocidos y responder un cuestionario

no recuerdo con exactitud todas las preguntas que contenía, lo que si pude deducir es que eran preguntas en primera persona

e íntimas de meditación.



 Resumido: Los dos realizamos el cuestionario y debo mencionar que mientras mi compañero respondía el cuestionario, sus respuestas me parecían poco acertadas, lo cual descubrí por qué, minutos después cuando me encontraba respondiendo el cuestionario:

¿Qué harías si descubrieras que padeces una enfermedad terminal?

y recordé que yo ya había muerto y reviví

¿Describe un día perfecto para ti?

y me imaginé a mi hermana a mi mama a mis mascotas y a mí, disfrutando del mar, de su compañía, de sus risas, y olvidé a mi papá

¿y por qué no lo has hecho?

porque estaba dormido, y desperté, sentí como si de mis ojos se cayera un velo que nublaba mi vista, y mis ojos se abrieron, más de lo que ya son,

 y mi boca sonrió y mis sentidos se excitaron, y mis pupilas se dilataron, y mis grilletes se abrieron   y la ropa que tenía puesta no me sirvió, para cubrir la desnudes en la que me dejo mi sinceridad.

 

 


martes, 2 de abril de 2024

Gatos Pardos - Guerrero, el salvaje

 

Guerrero, el salvaje

 

Hercilia Castro Balderas

 


Taxco de Alarcón, con sus calles empedradas y angostas, sus “burritas” (combis), su aire colonial, sus museos, sus parques llenos de árboles, sus barrios antiguos, su famosa plata, sus mercados y gente trabajadora, su Zócalo, su conservadurismo y elecciones siempre por partidos de derecha, sus mujeres que van a misa de gallo, sus mujeres que cuidan las capillas, sus cristos, vírgenes, su catolicismo arraigado, sus tradiciones sacras como la Semana Santa, atracción ya turística desde hace muchos años, sus Jornadas Alarconianas, su cercanía a la Ciudad de México y a Morelos, vivió su primer Jueves Santo manchado, ensangrentado, indignado por la desaparición de Camila y hallazgo de su pequeño cuerpecito de ocho años de edad en una bolsa negra, como si fuese, un residuo más.

Camila  desapareció la tarde del 27 de marzo después de acudir a casa de una vecina, quien la había invitado a jugar con su hija en una alberca inflable. En los vídeos de cámaras proporcionados por vecinos, se ve cómo la niña cruza la calle emocionada, quien la había invitado era su amiguita, hija de una amiga y vecina de su madre. Horas después, la vecina alegó que la niña nunca llegó. La madre denunció la desaparición de Cami, pero su queja fue rechazada por lo que tuvo que irse a la Fiscalía General del Estado (FGE) en Iguala, nadie, más que los vecinos de los padres de Cami, comenzaron a apoyar, en lo que a la Fiscalía se le hinchaba la gana girar las órdenes de aprehensión contra los secuestradores y cómplices, que le habían llamado  a la madre de Camila para pedir 250 mil pesos, eso, vale la vida de una menor, de cualquiera, a veces, menos.

 

Hicieron plantón a las afueras de la casa de Ana “N”, la vecina, toda la noche, hasta que la policía municipal se dio cuenta de que la ira era demasiada, la impotencia. Los pormenores, están ya en todos los medios nacionales e internacionales, de más es decir que los vecinos y la familia entraron a la casa de los raptores de Camila. Para el jueves santo, ya Cami era noticia de otra niña más asesinada en este país. Los medios en  las redes ya posteaban el vídeo de cómo la turba enardecida sacó a Ana , a su hijo y otros dos, con tubos, patadas, golpes, ya estaban siendo casi linchados por los taxqueños. Ana “N” y uno de sus hijos murieron por los golpes de hombres y mujeres, los Barrios, como el de Bermeja, no sacó este Jueves Santo a su Cristo en solidaridad con la familia de Camila.





La autoridad, como siempre, cometiendo omisión, negligencia, y desprecio a una sociedad enojada por su pasividad, autoridades, que , empezando por la gobernadora, deberían estar tras las rejas. Por esos delitos, omisión, negligencia, impunidad, y obstrucción al debido proceso en delitos como el secuestro y asesinato de una niña, una niña inocente por la que hoy llora Taxco.

 

2

Conozco Taxco desde niña, la mayor parte de mi infancia que la pasé entre Taxco, Cuernavaca, y la CDMX mi madre me llevaba con su familia, eran otros años, recuerdo a mis primas mayores, mis tíos, yo era la “niña” mientras ellos trabajaban de plateros, comerciantes, todo el día casi, su mercado y la belleza de las calles, de su orgullo, la Santa Prisca, las amigas de mi madre, sus ex vecinas, la tía Mary que siempre me esperaba con un plato de nata, ella aún compraba leche bronca, , este, es el primer intento de linchamiento que me toca ver de lejos.  Y sentirlo dolorosamente, indignada por lo que le pasó en Camila.

Siempre he ido en plan de turista, buscando el amor de mi familia materna, lo que no tenía de la paterna. Añorando los tlacoyos que vendían afuera de la casa de mi tía Mary, pero todo cambia. Todo ha cambiado y no por este hecho.

El periodista Oscar Balderas Méndez, especialista en crimen y narcotráfico, mencionó en su Twitter @OscarBalmenque: “Durante los últimos cinco años la Nueva Familia Michoacana se ha asumido como la verdadera policía municipal de Taxco. Es un trato de “pax narca”, el cártel se encarga de barrer con delincuentes del fuero común a cambio de que sus delitos del fuero federal sean ignorados”. También menciona que cuando ocurre un hecho que sacude a la población como el caso de Camila, la gente no acude a la policía municipal, pero esta vez, sí lo hicieron, porque los secuestradores y asesinos de Camila no tenían relación con la NFM, incluso que, es posible el cártel apoyara el linchamiento. Recomiendo leer todo su hilo sobre el caso.

3

Esta reportera que redacta lleva años siguiendo el tema del desplazamiento forzado en Guerrero, desde 2010, 14 años ya. En todos los casos los guerrerenses denuncian y no hay más que ignominia y una sabida colusión de autoridades corruptas con el Crimen Organizado, en toda la entidad es lo mismo, pueblos fantasmas de la Tierra Caliente, región Centro, y la Costa Grande entre otras regiones. Casas quemadas, hijos asesinados, niños reclutados por el narco, tan sólo lean al compañero Sergio Ocampo con el texto de ayer de un chico Mazahua secuestrado por la FM y que tuvo que participar en la guerra contra el cártel de los Tlacos “Eché a perder mi vida; estuve en una guerra muy fea contra los Tlacos”, https://www.jornada.com.mx/2024/04/01/estados/025n1est .

Narra su secuestro desde  el Estado de México hasta obligarlo a matar en Guerrero en una guerra que no era suya y que bien sabemos, desde Felipe Calderón Hinojosa, no ha parado nada, ni desapariciones, asesinatos entre cárteles, gente inocente, niños, mujeres, hombres, campesinos, comerciantes, activistas, etc. Porque esta fue y sigue siendo su guerra, no la nuestra.

4

Pero, para mí, lo más doloroso del crimen de Camila ha sido leer a todos los citadinos de la CDMX juzgar a mis paisanos, tratarlos de asesinos por exigir justicia, una justicia y órdenes de aprehensión que jamás llegaron. Su vida en la burbuja de muchos mexicanos y, sobre todo feministas e intelectuales o seudo intelectuales que nos tratan como criminales, como si Guerrero no fuera desde antes de Lucio Cabañas un laboratorio de tortura, el experimento de la Guerra de Baja Intensidad (GBI), la contrainsurgencia, el cacicazgo de gobernadores imponiendo compadres y dando órdenes de matar a todos los que se levantaran a exigir justicia, la cuál, sigue sin existir. Ni siquiera Morena, y eso que Guerrero siguió toda la vida a Andrés Manuel López Obrador, para sacar al PRI, al PRD, pero todos están coludidos, corruptos.

Tratándonos de salvajes, y sí, tal vez seamos broncudos por levantar la voz, por cerrar carreteras, quemar edificios como cuando fue lo de Ayotzinapa, la normal más emblemática que tiene su lema que mientras la miseria exista, las normales rurales tendrán razón de ser. Porque hemos sido guerrilleros, porque desde que tengo memoria, ir por la carretera era ya saber que en el Ticui o Bajos del Ejido los guachos (militares) te iban a revisar, iban a sembrar droga a los hombres, escuchar el terror de las mujeres de que se llevaran a sus hijos, maridos, y, para asustar a los niños el escuchar “sino te portas bien te van a llevar los guachos”, pese a que los retenes militares son ilegales pues todo mexicano, según la Carta Magna, tiene libertad de viajar por territorio mexicano. Eso no lo vivimos nosotros, jamás.

Por eso me ha calado que  juzguen a mis paisanos taxqueños. Digo, ¿Qué culpa tenemos nosotros que en otros estados sean pasivos y que Guerrero, los guerrerenses que nos partimos la madre  diariamente trabajando y viviendo ahora con el temor de ser extorsionados por el narco, o cualquier injusticia paremos calles y cerremos carreteras? Nosotros, no somos un estado dejado, sino uno que ha sufrido desde hace décadas.

La Guerra Sucia, la desaparición de Rosendo Radilla a manos de militares, tortura contra los campesinos ecologistas Teodoro Cabrera y Rodolfo Montiel, la masacre de Aguas Blancas, el asesinato de líderes como Norma Mesino, Ranferi Hernández, Luis Olivares, la desaparición de Víctor Ayala Tapia, todos ellos, campesinos en defensa de sus comunidades, la violación multitudinaria a Inés Fernández y Valentina Rosendo, la Matanza de los Copreros, las represiones al magisterio guerrerense, la desaparición de nuestros 43 normalistas de Ayotzinapa y miles de guerrerenses y sus familias buscándoles, la Masacre del Charco, el desplazamiento forzado, la desaparición de Vicente Suastegui Muñoz, líder opositor a la presa de La Parota en Acapulco en 2021 y el encarcelamiento sufrido de él y su hermano Marco Antonio Suastegui Muñoz en 2015, la desaparición de la campesina ecologista Eva Alarcón bajada de un autubus, el asesinato de Javier Torrres Cruz, campesino ecologista de La Morena, Petatlán, y que denunció como autor intelectual del crimen de Digna Ochoa al capo Rogaciano Alva Álvarez (don Roga)  las desapariciones y feminicidios no resueltos, y ahora, Camila.

Tantos y tantos asesinatos y amenazas y ustedes esperean nos quedemos civilizadamente sentados esperando justicia, no somos ustedes pero tampoco somos salvajes, sólo buscamos, seguimos, y lo digo a mis 46, justicia. Ignoro si algín día  Guerrero la verá. 

No, no somos salvajes, ni primitivos, simplemente, Guerrero, y si eso les da vergüenza como analistas, intelectuales, feministas, es un estado valiente, que día a día vive en medio de la militarización, cacicazgo y cárteles que matan inocentes, desaparecen personas, reclutan niños y adolescentes.

Guerrero, es valiente, sus periodistas en riesgo más, aunque como en algunos lados, ya somos zonas silenciadas. No es nuestra culpa, ustedes sean insensibles e ignorantes, que no sepan la historia de la entidad, menos, que por este estado, se consumó la Independencia de México y así como Oaxaca dio nuestro primer presidente indígena, a Benito Juárez, nosotros les dimos a Vicente Guerrero, el primer presidente afromexicano. Sí, también aquí somos negros.



Y Guerrero ha llevado casos a la Corte Internacional de Derechos Humanos, como el caso del cantautor y campesino, Rosendo Radilla, desaparecido en 1974 en un retén militar, la sentencia de la corte, no se ha cumplido al pie de la letra, el primer caso que puso al Estado Mexicano en jaque por desaparición forzada, violencia de Estado, más los casos de Inés y Valentina y, los campesinos ecologistas de Petatlán, Rodolfo y Teodoro, ganadores del premio Goldman y  liberados por la presión política internacional en el sexenio de Fox Quezada.

Justica es lo que nunca ha tenido Guerrero, impunidad, desde hace décadas y ahora, la criminalización a los guerrerenses en busca de eso, solamente justicia y un alto a una pesadilla de décadas.

Concluyo con la despedida de la madre de Camila en la caravana su última morada, su doloroso entierro: “Mi niña, ya no estás conmigo, todo por esa estúpida pendeja que te quitó la vida sólo por dinero”.

¿Ustedes son valientes o sólo viven en su burbuja intelectual y citadina; y, si a ustedes les mataran su hijo, hija y la autoridad no hace nada aun denuncien y marchen, esperarán?

 

 

 

 

 

 

 

Ponen centro de acopio de alimentos en apoyo a afectados por incendios en Santa Rosa

  Ponen centro de acopio de alimentos en apoyo a afectados por incendios en Santa Rosa                  Hercilia Castro Zihu...