Lanzan amenaza contra El Sur para hoy a las “2 de la tarde”
CNDH, Artículo 19 y Reporteros sin Fronteras piden protección
Redacción
El Sur recibió ayer una amenaza por teléfono en la redacción en Acapulco, dirigida al director, Juan Angulo Osorio
La amenaza se produjo cuatro meses y medio después de que la redacción del diario en esta ciudad fue atacada a balazos.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y las organizaciones no gubernamentales Artículo 19 y Reporteros sin Fronteras pidieron al gobierno federal el cumplimiento de las medidas cautelares que se dictaron tras la balacera de noviembre, mediante la vigilancia permanente a las instalaciones del periódico, que ayer se verificó de inmediato con patrullas de la Policía del Estado.
La noticia se difundió en noticieros de radio de la ciudad de México, y en éstos, Juan Angulo señaló que esta amenaza es parte de los ataques a la libertad de expresión, y se da al mismo tiempo que una campaña de agresiones a El Sur del gobernador del estado, Zeferino Torreblanca Galindo mediante declaraciones públicas y discursos en actos oficiales que se intensificó en la última semana como reacción al trabajo informativo del periódico.
Ayer, unos diez minutos antes de la una de la tarde, en la redacción de Acapulco se recibió una llamada telefónica de una mujer que disfrazaba la voz.
En la línea, la mujer se rió y dijo: “Dejamos un mensaje para Juan Angulo, cara de culo, para mañana 2 de la tarde, sálganse, sálganse los inocentes. Gracias”. Y colgó el teléfono.
Unas dos horas antes, trabajadores del periódico observaron la presencia de cinco hombres sospechosos a bordo de un automóvil Volkswagen Bora blanco, sin placas que se estacionó en la avenida Costera, frente a las instalaciones de El Sur.
En el vehículo, a pesar del intenso calor, los cinco sospechosos permanecieron unos 30 minutos, con una puerta trasera abierta, y miraban hacia la redacción del diario. De ese lado del carro estaba sentado un hombre robusto, calvo, con playera blanca y bermudas, que observaba hacia el periódico y en un momento caminó hacia la sucursal bancaria que se encuentra a un lado de El Sur pero nunca entró al banco.
Otros trabajadores recordaron que la semana pasada observaron una camioneta negra que se estacionó frente al periódico con unos siete hombres a bordo, algunos de los cuales calzaban botas.
Los trabajadores que se encontraban en la redacción cuando se recibió la llamada telefónica informaron de inmediato de la amenaza a los directivos y salieron de las oficinas.
Una de las primeras acciones fue avisar a la organización Artículo 19, que emitió un boletín de prensa en el que hace un enérgico llamado al Estado mexicano a instrumentar medidas emergentes para garantizar la seguridad de las y los colaboradores de El Sur, así como de sus instalaciones.
La organización no gubernamental que se dedica a la defensa de la libertad de expresión en el mundo, de manera particular, exige que las autoridades del gobierno de Guerrero cumplan con su responsabilidad de instrumentar las medidas cautelares dictadas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos con motivo del ataque a balazos a la redacción el 10 de noviembre.
Artículo 19 indica en su comunicado de prensa que el caso de las agresiones contra El Sur es “representativo del riesgo constante que enfrenta la prensa en los estados, pero también de la ineficacia que persiste en la instrumentación de medidas cautelares y la obligación del Estado mexicano para llevar a cabo medidas de prevención y así salvaguardar la integridad física de las y los comunicadores”.
Agrega que estos hechos resaltan la urgencia de que sea implementado el mecanismo de protección a periodistas anunciado por diferentes miembros del gobierno federal a finales del año pasado y el cual no cuenta con lineamientos para su operación.
La CNDH envió ayer una comunicación a la Secretaría de Gobernación federal en el que informa de la amenaza que recibió el diario, que se publicó en diversos medios.
El quinto visitador general de la CNDH, Fernando Batista Jiménez, que se dedica al Programa de Agravios a Periodistas y Defensores Civiles de Derechos Humanos, envió un texto al subsecretario de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, en el que solicita que “previo acuerdo con los beneficiarios de las medidas cautelares, se evalúen y, en su caso, determinen los mecanismos cautelares legalmente procedentes, a efecto de adoptar las acciones tendentes a salvaguardar la seguridad e integridad física del señor Juan Angulo Osorio e integrantes del medio que dirige y con ello evitar la consumación de hechos violatorios a derechos humanos de difícil o imposible reparación”.
El ataque del 10 de noviembre
El 10 de noviembre del año pasado un grupo de hombres armados atacó a balazos el interior de las instalaciones del periódico.
En las oficinas estaban 12 trabajadores –editores, correctores de estilo, diseñadores y auxiliares de redacción y de publicidad–, que realizaban su trabajo habitual y quienes apenas pudieron refugiarse ante la balacera.
En la redacción de El Sur quedaron casquillos percutidos de balas calibre 9 milímetros, 40 y 45; los pistoleros rociaron gasolina en la redacción, en un evidente intento de prender fuego a las instalaciones del periódico.
La Procuraduría General de Justicia del Estado no ha reportado hasta ahora ningún resultado de la investigación de ese hecho.
http://www.suracapulco.com.mx/nota1.php?id_nota=98945
CNDH, Artículo 19 y Reporteros sin Fronteras piden protección
RedacciónEl Sur recibió ayer una amenaza por teléfono en la redacción en Acapulco, dirigida al director, Juan Angulo Osorio
La amenaza se produjo cuatro meses y medio después de que la redacción del diario en esta ciudad fue atacada a balazos.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y las organizaciones no gubernamentales Artículo 19 y Reporteros sin Fronteras pidieron al gobierno federal el cumplimiento de las medidas cautelares que se dictaron tras la balacera de noviembre, mediante la vigilancia permanente a las instalaciones del periódico, que ayer se verificó de inmediato con patrullas de la Policía del Estado.
La noticia se difundió en noticieros de radio de la ciudad de México, y en éstos, Juan Angulo señaló que esta amenaza es parte de los ataques a la libertad de expresión, y se da al mismo tiempo que una campaña de agresiones a El Sur del gobernador del estado, Zeferino Torreblanca Galindo mediante declaraciones públicas y discursos en actos oficiales que se intensificó en la última semana como reacción al trabajo informativo del periódico.
Ayer, unos diez minutos antes de la una de la tarde, en la redacción de Acapulco se recibió una llamada telefónica de una mujer que disfrazaba la voz.
En la línea, la mujer se rió y dijo: “Dejamos un mensaje para Juan Angulo, cara de culo, para mañana 2 de la tarde, sálganse, sálganse los inocentes. Gracias”. Y colgó el teléfono.
Unas dos horas antes, trabajadores del periódico observaron la presencia de cinco hombres sospechosos a bordo de un automóvil Volkswagen Bora blanco, sin placas que se estacionó en la avenida Costera, frente a las instalaciones de El Sur.
En el vehículo, a pesar del intenso calor, los cinco sospechosos permanecieron unos 30 minutos, con una puerta trasera abierta, y miraban hacia la redacción del diario. De ese lado del carro estaba sentado un hombre robusto, calvo, con playera blanca y bermudas, que observaba hacia el periódico y en un momento caminó hacia la sucursal bancaria que se encuentra a un lado de El Sur pero nunca entró al banco.
Otros trabajadores recordaron que la semana pasada observaron una camioneta negra que se estacionó frente al periódico con unos siete hombres a bordo, algunos de los cuales calzaban botas.
Los trabajadores que se encontraban en la redacción cuando se recibió la llamada telefónica informaron de inmediato de la amenaza a los directivos y salieron de las oficinas.
Una de las primeras acciones fue avisar a la organización Artículo 19, que emitió un boletín de prensa en el que hace un enérgico llamado al Estado mexicano a instrumentar medidas emergentes para garantizar la seguridad de las y los colaboradores de El Sur, así como de sus instalaciones.
La organización no gubernamental que se dedica a la defensa de la libertad de expresión en el mundo, de manera particular, exige que las autoridades del gobierno de Guerrero cumplan con su responsabilidad de instrumentar las medidas cautelares dictadas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos con motivo del ataque a balazos a la redacción el 10 de noviembre.
Artículo 19 indica en su comunicado de prensa que el caso de las agresiones contra El Sur es “representativo del riesgo constante que enfrenta la prensa en los estados, pero también de la ineficacia que persiste en la instrumentación de medidas cautelares y la obligación del Estado mexicano para llevar a cabo medidas de prevención y así salvaguardar la integridad física de las y los comunicadores”.
Agrega que estos hechos resaltan la urgencia de que sea implementado el mecanismo de protección a periodistas anunciado por diferentes miembros del gobierno federal a finales del año pasado y el cual no cuenta con lineamientos para su operación.
La CNDH envió ayer una comunicación a la Secretaría de Gobernación federal en el que informa de la amenaza que recibió el diario, que se publicó en diversos medios.
El quinto visitador general de la CNDH, Fernando Batista Jiménez, que se dedica al Programa de Agravios a Periodistas y Defensores Civiles de Derechos Humanos, envió un texto al subsecretario de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, en el que solicita que “previo acuerdo con los beneficiarios de las medidas cautelares, se evalúen y, en su caso, determinen los mecanismos cautelares legalmente procedentes, a efecto de adoptar las acciones tendentes a salvaguardar la seguridad e integridad física del señor Juan Angulo Osorio e integrantes del medio que dirige y con ello evitar la consumación de hechos violatorios a derechos humanos de difícil o imposible reparación”.
El ataque del 10 de noviembre
El 10 de noviembre del año pasado un grupo de hombres armados atacó a balazos el interior de las instalaciones del periódico.
En las oficinas estaban 12 trabajadores –editores, correctores de estilo, diseñadores y auxiliares de redacción y de publicidad–, que realizaban su trabajo habitual y quienes apenas pudieron refugiarse ante la balacera.
En la redacción de El Sur quedaron casquillos percutidos de balas calibre 9 milímetros, 40 y 45; los pistoleros rociaron gasolina en la redacción, en un evidente intento de prender fuego a las instalaciones del periódico.
La Procuraduría General de Justicia del Estado no ha reportado hasta ahora ningún resultado de la investigación de ese hecho.
http://www.suracapulco.com.mx/nota1.php?id_nota=98945
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