El supuesto dueño advirte que denunciará a los pobladores de la colonia por despojo

Vecinos impiden a particulares y policías intento de cercar predio en Playa Blanca

Abogado informa a los inconformes que el terreno fue cedido a Rafael Santiago el 12 de septiembre

FRANCISCA MEZA CARRANZA ( Corresponsal)

Zihuatanejo, 28 de octubre. De nueva cuenta, trabajadores custodiados por policías municipales llegaron al lote 34-C de Playa Blanca para intentar cercarlo con el argumento de que iban por órdenes del dueño; sin embargo, la acción se detuvo ante la oposición de los ejidatarios del lugar.

En tanto, Rafael Santiago Montañés, quien se dijo dueño del predio, aseguró que presentará una demanda penal en contra de los posesionarios por despojo.

Aproximadamente a las 11 de la mañana, 15 personas llegaron a bordo de tres camionetas particulares, una de ellas marcada con la razón social Fombona, Servicio Particular, en la que llevaban tablas, láminas de cartón, barrotes y alambre de púas para cercar el predio que desde años ha estado en disputa.

De manera inmediata, los trabajadores colocaron barrotes a lo largo del terreno ubicado junto a la casa de la familia Arriaga Valdovinos, que en dos ocasiones ya han sufrido dos intentos de desalojo, y comenzaron a colocar el alambre de púas para delimitar el terreno.

Al darse cuenta de la situación los habitantes se acercaron y se metieron al predio que ya era vigilado por los policías que llegaron a bordo de cuatro camionetas, una patrulla y tres motocicletas, de las utilizadas para atención inmediata.

Un grupo de agentes se colocó debajo de la ramada que los lugareños ocupan para reunirse y también un grupo de esos se apostó en el lugar.

La postura era la misma: no permitir que personas extrañas al lugar se posesionaran de predio.

Justo donde los trabajadores colocaban el alambre de púas, en un árbol de almendras, estaba un enorme enjambre de abejas africanizadas habitado por miles de ellas, lo que detuvo por un momento el trabajo debido a que llamaron a los bomberos para que fueran a eliminarlas.

Mientras, al lugar llegaban más vecinos quienes advirtieron a los presentes que no permitirían que nadie ajeno al lugar se quedara con el lote.

Los trabajadores, quienes iban encabezados por un hombre llamado Raymundo, se colocaron varios metros dentro del terreno y de lejos esperaban que algo pasara.

Más tarde, llegó un abogado de apellido Rodríguez, quien les informó a los ejidatarios que el predio ya se le había entregado a Santiago Montañés el 12 de septiembre, durante uno de los desalojos efectuados.

El argumento molestó a los lugareños, pues dijeron que cuando ha habido intentos de desalojos, incluso violentos, ningún representante o apoderado legal se ha presentado, por lo que desconocieron el recurso del abogado.

También les presentó una sentencia a favor de su representado lo cual tampoco fue válido para los habitantes quienes también dijeron que tienen una sentencia a su favor dictada este mismo año.

Los vecinos pidieron hablar con el supuesto dueño, pero, por seguridad, se negó a acudir.

Los inconformes dijeron al abogado que por que si su representado se decía dueño no acudía al lugar a negociar con ellos el terreno, a lo que Rodríguez les respondió que lo comentaría con él; acto seguido se retiró del lugar con todo y trabajadores con su material.

Más tarde, Santiago Montañés aceptó hablar ante los medios de comunicación. Explicó que él compró el terreno a Francisco Bravo Díaz, quien, según los ejidatarios, ya falleció; no obstante, se negó a decir cuánto pagó por el predio en disputa.

También dijo que en ese tiempo Bravo Díaz le extendió un poder notarial de posesión del terreno por lo que empezó el juicio en contra de Jesús Arriaga, Isidro Cortecón, Leticia Vargas Núñez e Hilario Vargas, quienes estaban asentados en el terreno.

Aseguró que a todos ellos se les dio dinero, un promedio de 300 mil pesos, y que incluso en el juicio efectuado en días pasados estos reconocieron haber invadido el predio, dividido en cuatro lotes.

Puntualizó que si los inconformes aseguran que Bravo Díaz ya está muerto lo tuvieron que haber demostrado en el juicio, pero eso no ocurrió.

Debido a esto, dijo, en septiembre se dictó la sentencia a su favor por lo que ha intentado quedarse con el lugar; sin embargo, no ha podido por la negativa de los habitantes.

Finalmente, Santiago Montañés aseveró que pelea solamente lo que es suyo y que no pretende avasallar ni robar a nadie। No obstante, aseguró que interpondrá una denuncia penal en contra de los opositores por el despojo del que es víctima.

http://www.lajornadaguerrero.com.mx/2009/10/29/index.php?section=regiones&article=011n1reg