viernes, 8 de mayo de 2009

Culpa PGJE a Javier Torres de la desaparición de Alvaro Rosas

Diferencias por negocios ilícitos y de armas, el móvil de la investigación ministerial
Culpa PGJE a Javier Torres de la desaparición de Alvaro Rosas

Minutos después el fiscal se desdice y asegura que sólo interrogan a ecologistas

MARLEN CASTRO 

CHILPANCINGO, 7 DE MAYO. Una de las líneas de investigación que sigue la Procuraduría de Justicia del Estado (PGJE) sobre la desaparición de Alvaro Rosas Martínez, integrante del equipo de campaña del candidato a diputado federal del PRD por el distrito 3, Armando Ríos Piter, involucra como sospechoso al ecologista Javier Torres Cruz, quien en diciembre pasado fue encontrado con severas huellas de tortura tras 10 días de desaparecido.

Lo anterior, de acuerdo con una tarjeta informativa que de manera casual observaron algunos perredistas y reporteros durante una reunión del procurador Eduardo Murueta con familiares de Rosas Martínez, dirigentes y diputados del sol azteca, la cual se llevó a cabo esta mañana.

Ese documento afirma que Rosas Martínez, Torres Cruz y Neftali Rosas Cruz, este último detenido hace días por posesión ilegal de armas de fuego, los tres son integrantes de la Organización de Ecologistas de la Sierra de Petatlán y además familiares, “desde hace años trabajan juntos en el negocio de enervantes, armas y cartuchos”.

Agregó: “por los negocios sucios se comenzaron a tener desconfianza” y que hace como cuatro años fue asesinado el hermano de Javier, a quien conocían como Chemo y que los Torres Cruz achacaron esta muerte a Alvaro Rosas.

En la misma reunión, Bertoldo Martínez Cruz, integrante del Colectivo contra la Tortura y la Impunidad, reprochó al procurador esta desviación de la investigación, pues cuestionó la premura con la que le pasaron esta tarjeta a Murueta, misma que fue copiada por los perredistas; incluso, le tomaron una fotografía.

Martínez le dijo al procurador que era inadmisible que se acusara a Javier Torres Cruz. “Eso está muy cabrón; este muchacho (Torres) es perseguido, no sale de la sierra, si esa información tiene usted anda muy lejos de la realidad”.

Entrevistado poco después, Murueta respondió de manera muy accidentada sobre el particular.

Dijo que no se investigaba a Torres Cruz por la desaparición de Alvaro Rosas, que sólo se comentó que “tenían relación porque son familiares”, pero en ese momento el fiscal desconocía que su tarjeta informativa había sido leída.

Se le preguntó que tenía que ver ahí Neftali Rosas y sólo refirió que son familiares, que fue detenido y que “lo entrevistaron para ver qué datos podía otorgar” y que fue quien les dijo que Torres le había pedido ayuda a Alvaro Rosas, pero el fiscal ya no quiso decir qué tipo de ayuda o qué tenía que ver eso con la desaparición.

En tanto, el diputado del PRD, Sebastián de la Rosa, recriminó esta línea de investigación y expresó su rechazo. Reveló que a dos días de la desaparición de Alvaro Rosas, la Procuraduría ya estaba siguiendo esa línea de investigación, según se lo contó el mismo procurador en una conversación telefónica.

En esa charla el fiscal le informó que detrás de la desaparición había un negocio de la compra de un lote de madera a Javier Torres Cruz, el que Alvaro Rosas se había negado a pagar, “pero eso es un absurdo, primero porque los Torres Cruz no se dedican a la venta de madera y segundo, porque Alvaro Rosas, tampoco”.

http://www.lajornadaguerrero.com.mx/2009/05/08/index.php?section=politica&article=003n1pol


 

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