Autoritarismo, cacicazgo y despotismo del gobierno estatal al nombrar a la directora del Fuerte, acusan

Autoritarismo, cacicazgo y despotismo del gobierno estatal al nombrar a la directora del Fuerte, acusan



Karla Galarce Sosa


Autoritarismo, cacicazgo, despotismo, tiranía y dictadura fueron los calificativos con los que creadores, promotores y dirigentes
sociales profirieron al gobierno estatal, luego de que trabajadores basificados del Fuerte de San Diego denunciaron que el
gobernador Zeferino Torreblanca Galindo intervino para que Narda Alcántara Valverde, prima de su secretario particular, César
Bajos Valverde, fuera designada directora de ese museo histórico, sin cubrir los requisitos que el Instituto Nacional de
Antropología e Historia establece en sus normas.
La promotora cultural taxqueña Maricela Quinto Gaytán señaló que el estado de Guerrero vive en un ambiente de cacicazgo y
nepotismo aunque “eso no ese nuevo. Se trata de una práctica corriente y cotidiana”, lamentó.
Entrevistada vía telefónica consideró que los trabajadores del Fuerte de San Diego, merecen todo el apoyo ante las denuncias que
realizaron. Agregó que “el INAH se ha hecho un muro de contención para que nosotros no podamos expresar nuestra solidaridad;
es una institución que trata a los trabajadores de arriba para abajo”.
Argumentó que al parecer lo que le aprueban al gobierno de estado de Guerrero fuera de la entidad, “es ley” y “pareciera que
todo lo que se hace es al gusto de los gobernantes del estado”.
En relación a los requisitos solicitados por el INAH para cubrir esos puestos directivos y que Alcántara Valverde no cumple,
Quinto opinó que muestra el autoritarismo de los gobernadores guerrerenses.
Por otro lado la integrante de la Red de Organizaciones y Grupos Ambientalistas (Rogaz), Hercilia Castro Balderas comentó que es
una falta de respeto al trabajo que de manera conjunta los empleados habían iniciado con el anterior director del Fuerte, Víctor
Hugo Jasso.
Aseguró que es un abuso de autoridad la intervención de Zeferino Torreblanca “el clásico amigazgo de las autoridades que
siempre quieren sobrepasar los derechos y peticiones del trabajador”.
Sumado a ello, aseveró, está la irresponsabilidad del INAH por permitir que no se cumplan sus propios lineamientos.
En relación a los comentarios que hiciera Alcántara Valverde en cuanto a que los proyectos que Jasso Ortiz emprendió y que para
la actual funcionaria “no son prioridad”, Castro Balderas expuso: “Está dejando de lado el reconocimiento que merece un lugar
histórico, no solo del estado, sino del país ya que en el Fuerte de San Diego se dio una magna batalla”.
Exigió, a quien corresponda, poner un alto al “amigazgo y a la imposición de un funcionario inepto, sea familiar del gobernador
o del ejecutivo federal. Si los trabajadores no aceptan a esta mujer, que se vaya. Ni el ejecutivo federal, ni Zeferino, ni su primo
son dueños de Guerrero”, concluyo.
Por otro lado la directora de Cultura de Acapulco Blanca Reina Aguirre dijo que una dependencia federal como el INAH se
“arriesga al no seguir los lineamientos para asignar a sus directivos”.
Comentó que la prima de César Bajos Valverde, secretario particular de Zeferino Torreblanca, está en el derecho de emitir su
opinión con el Festival de la Nao, sin embargo consideró que se debe llegar a algún acuerdo.
Lamentó que el ayuntamiento no haya logrado aún alguna reunión con la actual directora del Fuerte de San Diego.
“Esperamos los acuerdos. Creo que todos vamos a salir perdiendo si el Fuerte de San Diego no es sede del Festival de la Nao para
beneficio de los acapulqueños como destino turístico con el festival. Podemos aspirar a convertirnos en un destino turístico
cultural como un valor agregado”, aseveró.
El escritor y becario del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de este año, Antonio Salinas Bautista comentó que “por más que
uno quiera involucrar al gobierno del estado en actividades culturales, para Zeferino, la cultura (le) es indiferente”.
Argumentó que los cargos que Torreblanca Galindo “otorga” para el área de cultura en la entidad, son “compromisos” que sólo
demuestran su falta de visión.
Para el también promotor cultural, el cese del cargo en la dirección del Fuerte al museólogo Víctor Hugo Jasso Ortiz fue poco
claro.
“Si no nos ayudas, no nos perjudiques. Creo que Zeferino metió las manos en este asunto y sólo para regarla”, opinó.
Habló de que en cada acción que Torreblanca Galindo emprende, se trata de una “payasada”.


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