Isabel Hernández del Valle fue detenido en noviembre de 1974
Relata sobreviviente su paso por el cuartel militar ubicado en Atoyac
Atoyac, 12 de marzo. El 4 de noviembre de 1974, Isabel Hernández del Valle, habitante de la comunidad de El Ticuí, en este municipio, fue detenido por el Ejército y llevado al cuartel militar que operó en esta cabecera acusado de participar en la guerrilla de Lucio Cabañas. Los golpes que le propinaron los soldados le causaron lesiones, principalmente en los pulmones, que , según le han dicho los médicos, lo mantendrán convaleciente por el resto de su vida.
Durante los 27 días que permaneció recluido en el campo militar, asegura, pudo ver cómo los militares torturaban a los hombres que eran llevados ahí, en su afán por saber dónde estaba Lucio Cabañas. “Cuando estuve adentro, escuché los gritos, lamentos y llanto de los campesinos que eran arrestados por los federales. Los golpeaban hasta dejarlos sin fuerzas y después los echaban a las celdas para continuar con otros que llegaban”, contó el hombre de ahora 78 años.
Las golpizas y torturas, agregó, eran sobre todo en las noches. “Muchas veces oí cuando en la madrugada llegaban con más presos, a los que golpeaban con sus armas hasta que sangraban y quedaban inconscientes tirados en el suelo”, recordó.
En entrevista, Hernández del Valle narró que gracias a un soldado con quien hizo amistad en el tiempo que estuvo dentro y que abogó por él, fue dejado en libertad.
La liberación
“A las 2 de la madrugada, los soldados me subieron a un camión y me dejaron cerca de Tecpan, en un pueblo llamado Villa Rotaria. Ahí me abandonaron y no tuve más remedio que caminar hasta que llegué a El Súchil, donde toqué la puerta de una casa. La dueña me abrió y me dio de comer, y su esposo me regaló cinco pesos con los que pude llegar a Tecpan y de ahí a El Ticuí”, rememora, mientras le viene un ataque de tos.
El anciano dijo que su hermano Francisco también fue detenido, acusado de participar en el grupo del guerrillero: “A él lo detuvieron antes que a mí, el 2 de octubre de ese mismo año, y hasta ahora no sabemos nada de su paradero, si lo mataron o está preso en alguna otra parte”. Agregó que muy posiblemente en esta ocasión los de la PGR encuentren algo, “porque yo escuché los gritos de aquellos que como yo cayeron presos en este lugar”.
http://www.lajornadaguerrero.com.mx/2013/03/13/index.php?section=politica&article=004n2pol
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