Llegaron desde Alcholoa, atraídos por el turismo
por: Hercilia Castro/GUERRERO
"Nosotros somos de Alcholoa, del municipio de Atoyac de Álvarez, de allá venimos", cuenta mientras va por otro costalillo de semillas para vaciar en los anaqueles dónde explica las clases de café que venden, desde el "deslavado" hasta el café caracolillo (que lleva el nombre por la forma de caracol pequeño).
"Aquí en Zihuatanejo se trabaja con el turismo y con los de aquí (porteños), vienen los parroquianos, los del pueblo, hacen sus charlas de café, de aquí, a contar la noticia del día, cómo era Zihuatanejo con sus lagos, cuando era chico, y los turistas se interesan en eso”.
Le pusieron Café Costa del Sol porque después de dos nombres (café Atoyac y café Zihuatanejo) que no registraron, se quedaron con éste.
Ubicado en la avenida Benito Juárez, sobre calle Ejido "o frente a florería bugambilias y el puesto de periódicos", desde las 6 de la mañana el negocio familiar de los Leyva comienza el ajetreo de la venta de café, y ahora pan y dulces tradicionales.
Con una banca de madera se van enfilando los "parroquianos" y uno que otro desvelado a comentar lo del día, mientras el aroma conquista a todo aquel que pasa.
Un lugar muy concurrido y en cierta forma familiar, que durante 27 años ha hecho la cultura del café en Zihuatanejo. Al despedirse esta reportera lleva consigo un suave perfume mientras va saboreando una taza de fresco y delicioso café caliente, cortesía de Costa del Sol.
http://www.magazinemx.com/bj/articulos/articulos.php?art=10250
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