La lucha armada todavía es opción: Micaela Cabañas

El gobierno no deja otro camino, sostiene

La lucha armada todavía es opción: Micaela Cabañas
ROBERTO RAMIREZ Y RODOLFO VALADEZ (Reportero y corresponsal)

ATOYAC, 2 de diciembre. Micaela Cabañas Ayala, hija del guerrillero Lucio Cabañas, esboza una mueca que intenta ser una sonrisa: “¿usted cree que a Lucio le hubiera gustado irse a la sierra y dejar morir tanta gente?”. Luego ella sola se responde: “No le dejaron otra salida”.

En entrevista con La Jornada Guerrero, advierte que la lucha armada sigue vigente –aunque deben utilizarse nuevas maneras de lucha–, porque es originada por el propio gobierno, que es el que finalmente determina hacia dónde caminan los movimientos.

Vestida con una playera verde, pantalón de mezclilla y un sombrero, de cuerpo robusto y mediana estatura, Mica, como la llaman sus compañeros, supo la historia de su padre después de un silencio causado por el miedo en que vivió su madre durante 30 años, presa de amenazas del gobierno, por haber sido esposa del insurgente.

“Mi madre fue siempre cuidadosa conmigo de no exponerme a la sociedad abiertamente, siempre prohibiéndonos cosas o negándonos permisos con el fin de que no corriera ningún riesgo, con decir que tenía prohibido hasta ser jefe de grupo en mi salón”, recuerda.

Profesora, militante de la CETEG, advierte, de entrada, que “las condiciones no han cambiado” respecto a lo que vivió su padre en su tiempo.

“Según los gobernantes se quieren identificar con el pueblo, pero no es cierto, sigue habiendo mucha gente rica que explota a la pobre y se aprovecha de su ignorancia.Yo siento que Lucio siempre luchó por defender las causas justas. Eso sigue existiendo, y por eso los ideales, y Lucio mismo, siguen vivos todavía”, afirma.

Fue de las últimas oradoras en el mitin del zócalo de esta ciudad. Le acompañaban Catarino Cortés Navarro, el hijo del lugarteniente de Lucio, Camilo Cortés, y Diego Lucero Estrada, hijo del integrante de la Liga Comunista 23 de Septiembre, Diego Lucero Martínez, ambos asesinados.

–¿Qué formas de lucha se podrían hacer ahorita?

–La prueba está en Acapulco: yo sé que sí incomodamos a la población (con el reciente movimiento de la CETEG contra la ACE), pero si la población fuera otra y dijera estamos con ustedes, el gobierno fuera otro, porque nosotros pusimos al gobierno y él nos debe responder. Por eso las marchas y todo eso son válidas todavía. Hay quienes dicen ‘hay que hacer lo que hizo el maestro Lucio’, pero el maestro Lucio lo hizo porque el gobierno no le dejó otra salida, porque él también así (actuó) con marchas y todo eso y los estudiantes del 68 igual, lo hacían con marchas, sin embargo no les dejaron otra salida, hasta que los mataron.

–Entonces, ¿lucha armada sólo en caso extremo?

–Extremo, sí. El gobierno mismo te dice hacia dónde tienes que caminar; si tú vas y le pides con un oficio, no te pelan, no te hacen caso, es la realidad; si les haces una manifestación y son poquita gente, dicen: son pocos; si ya ven un buen número de gente, como en Acapulco el 20 de noviembre, entonces sí, hay que hacerles caso, sí son muchos. ¿Qué quieren? Nos están obligando.

Cabañas Ayala, quien recuerda que siendo niña estuvo presa en el Campo Militar Número 1, al ser detenida junto con su madre y toda la familia Cabañas, afirma ahora: “Nuestro principal objetivo es rescatar la memoria histórica, y que se haga justicia, se le dé el reconocimiento a nuestros padres y a nuestros luchadores sociales, no nada más en Guerrero, sino en todo el país”. Junto con otros hijos de guerrilleros y desaparecidos, forma parte del colectivo Nacidos en la Tempestad, creado recientemente con ese fin.

“Hace cuatro años mi madre accedió a platicarme lo que le ocurrió a mi padre, su lucha, sus ideales, y hoy me da gusto ver que su nombre sigue en la memoria de muchos luchadores sociales y que como para mí, sea un ejemplo a seguir en nuestro estado y nuestro país”.

–¿Lucio sigue vivo?

–Sí. Sigue vivo en los corazones. Si su cuerpo estuviera aquí, ¿tú crees que aquí estuviéramos estas poquitas personas? No. Lucio de verdad tocaba los corazones y las conciencias de la gente. Y para mí es mi ídolo.

http://www.lajornadaguerrero.com.mx/2008/12/03/index.php?section=sociedad&article=006n2soc